26 de octubre de 2010

Segundas impresiones

Lo prometido es deuda... y como ya ha pasado un montón de tiempo y mis primeras impresiones pues como que ya se han desvanecido en el olvido, quería compartir con vosotros las impresiones que me van quedando, las curiosidades y cosas que impactan y a las que poco a poco uno se va acostumbrando.
Cómo decirlo, cómo explicar el ambiente, lo que se ve y lo que no se ve en un país que parece (aunque no lo sé a ciencia cierta, puesto que yo no estaba allí (o no me acuerdo casi ;)) la España de los años 70 u 80 (entre mis otros compañeros profesores españoles tenemos dudas a la hora de decidirnos por una u otra década...) con rasgos y características propias del siglo XXI... es una especie de monstruo deforme... no quiero que estas palabras puedan parecer negativas (aunque sea complicado) pero es que me recuerda a algo parecido... o al pie de las hermanastras de Cenicienta intentando ser embutido en el zapatito de cristal... Es algo que no está del todo bien... algo que no sigue su curso natural, que no se ha desarrollado a su velocidad normal (como cuando cocinamos un bizcocho, creemos que ya está listo y a los 5 minutos de sacarlo del horno hace poooofff... y se queda en nada) y que por lo tanto tiene muchos contrastes. Un país que mide unos 500 kilómetros de extremo a extremo (en su parte alargada. En dirección N-S son menos de 400) y donde las distancias y el tiempo, como Einstein anunció, se hacen relativos, ya que los 400 kilómetros que separan Sofía de Burgas se convierten en 6 horas y media de autobús, o 7 horas de tren. Sí, queridos amigos, a una media de 60 kilómetros por hora... que casi llego antes corriendo... si no fuera por las maletas y por el fresco que ya empieza a arreciar...
Por lo demás, decir que en Bulgaria he vuelto a ver una televisión en blanco y negro (aunque yo en casa tengo mi tele de cable + internet por 34 levas al mes (unos 17 €uros mensuales)), he notado que algunas de las señales de las autopistas, esas en las que en un círculo aparece un caballito tirando de un carro, aquí siguen plénamente en vigor, ya que más de tres y cuatro nos cruzamos en nuestro micro-bus cuando viajábamos de Veliko Tarnovo a Burgas... Más cosas... ahora que está a puntito de (volver a) cambiar la ley contra el tabaco en España, pienso en vosotros con nostalgia, recordando el viajecito que me dio el conductor (sí, el conductor!!) este mismo sábado, yendo yo en segunda fila, y él, conduciendo y fumando como un carretero... (será eso progresar laboralmente? (de carretero a conductor de buses)) el mismo viaje en el que, a los 10 minutos de salir de Sofía (y sin haber abandonado aún la ciudad) nos paramos en una gasolinera a repostar... pero no un poquito, no... como os decía, iba en 2ª fila y mi punto de vista era bastante bueno... 138.39 litros, a 2.24 levas el litro de Diesel, son 309.99 levas... Y lo mejor... los pasajeros dentro del autobús (los conductores de cháchara fuera) y el motor encendido!! Vamos, eso en España no se ve, ni queriendo... y no sé siquiera si hace 40 años siquiera lo harían...

[...]

Bueno, que todo esto lo tenía medio escrito desde hace una semana, y pensaba terminarlo y publicarlo lo antes posible, pero es que estoy super liado corrigiendo exámenes, y, menos mal que este fin de semana dura un día y una hor más, porque si no, no creo que me diera tiempo (aún así, veo que voy a andar un poquillo apurado) en fin... la dura vida del profesor, que se lleva el trabajo a casa...
Releeré y continuaré con el post más adelante... De momento, os dejo lo que había escrito ya.
Un saludo y hasta pronto (espero).

CIAO.